5 preguntas sexuales que la gente no se atreve a hacer.
Existen algunas situaciones en la intimidad que ponen a dudar si está bien lo que ha pasado o requiere atención inmediata, sin embargo, por vergüenza muchas veces las personas no se atreven a realizar esas preguntas sexuales incómodas a su médico.
Lo más recomendable es tener una comunicación abierta con tu pareja y una gran confianza con tu médico familiar, ya que de ello depende que tengas una buena salud sexual.
Conoce algunas de las preguntas mas incómodas que deberías aclarar.
1.- ¿Es orina o semen?
Algunas personas pueden hacer pipí accidentalmente durante el sexo. Una forma de aclararlo es, si el condón no tiene ningún orificio y observas una mancha en las sábanas sólo tienes que acercarte un poco a olerla.
Algunas posiciones como la del misionero, la cual presionan la vejiga pueden ocasionar la salida del líquido.
2..- Es normal llorar o reír durante el sexo?
El sexo es un evento neurológico y emocional, por lo que las emociones quedan a flor de piel. Además, las hormonas son un factor para registrar esas emociones encontradas.
3.- ¿A qué se debe la sequedad vaginal?
Algunas mujeres aun cuando no están en la menopausia o están muy excitadas no lubrican lo necesario para disfrutar del contacto íntimo. No obstante, existen varios factores que intervienen para mantener la zona lubricada como la toma de anticonceptivos o alguna enfermedad como la diabetes.
4.- ¿Por qué sangro después del sexo?
Si el sangrado es de color claro y mínimo puede ser por una irritación ocasionada por la fricción, pero si en todos los encuentros sexuales ocurre lo mismo y es abundante, debes acudir con tu médico para descartar la presencia de una infección o enfermedad como la clamidia o gonorrea.
5.- ¿Por qué se presenta un mal olor?
Si sientes un olor a pescado tal vez tengas una infección como la vaginosis bacteriana o el PH de tu vagina está demasiado elevado.
Recuerda que es importante que atiendas cualquier anormalidad en la intimidad, ya que si se atiende tiempo, puedes prevenir el desarrollo de enfermedades o infecciones.