La Cámara de Diputados aprobó este martes (8) en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2023, que estima un gasto neto por 8.3 billones de pesos, entre recortes a los órganos judicial y electoral, y aumentos a los subsidios gubernamentales y mega obras del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con 273 votos a favor, 222 en contra y cero abstenciones, el pleno avaló el incremento del 11% en el gasto del Gobierno, así como un alza del 15% en los subsidios gubernamentales, que ha sido visto por organizaciones nacionales como intenciones para ganar votos rumbo a las elecciones de 2024.
Además, el gasto prevé una inversión fija bruta mayor en un 21%, la cual será destinada en su mayoría a los proyectos emblemáticos del presidente López Obrador en el sureste mexicano, como la Refinería Olmeca, de Dos Bocas, el Tren Maya, el Corredor Interoceánico o el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles”.
Al defender el proyecto del presupuesto, el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Erasmo González, dijo que este presupuesto “busca dar continuidad a la política social para garantizar el bienestar de las familias”.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que presentó el proyecto de presupuesto para el año entrante el pasado 8 de septiembre, aseguró que este gasto programado para 2023 “es congruente y mantiene la política de austeridad republicana, así como el no endeudamiento y sin incrementos a los impuestos”.
Con su aprobación en lo general, el PEF 2023 también prevé un déficit presupuestario por 1.13 billones de pesos, al prever ingresos por 7.1 billones de pesos en la Ley de Ingresos, previamente aprobada por el Congreso.