En la nueva ronda de diálogo, el gobierno del presidente Nicolás Maduro ha puesto sus cartas sobre la mesa: una propuesta de temas que apunta a «la prosperidad económica, la felicidad social y la soberanía nacional».
Este sábado el Gobierno de Maduro y la oposición han acordado en la mesa de diálogo presidida por el Vaticano y la Unasur establecer una hoja de ruta que reistaure las relaciones entre los poderes públicos, preserve el orden constitucional y la convivencia pacífica.
«Actuar bajo el respeto mutuo y mejorar las condiciones de abastecimiento de alimentos a la población», ha comentado el enviado especial del Vaticano, el monseñor Claudio María Celli, los esfuerzos del Gobierno y la MUD de establecer relaciones pacíficas.
El documento también incluye acuerdos en el campo económico-social que ayudarán a eliminar en todas sus formas el sabotaje y el boicot a la economía nacional.
Hablando del ámbito político, se han acordado el nombramiento de dos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) para poder cambiar la situación de desacato de la Asamblea Nacional dictada por el Tribunal Supremo de Justicia.
No obstante, a pesar de estos avances en el diálogo, las partes no han logrado acordar celebrar las elecciones de diputados en el estado de Amazonas, que podrían permitir la liberación de presos políticos y el abastecimiento de medicinas, según informa la corresponsal de RT Érica Ortega Sanoja en su Twitter, citando al alcalde de Sucre, Carlos Ocariz.
