Záyin Dáleth Villavicencio / @ZayinDaleth3_0
Sao Paulo.- En medio de la polémica Copa del mundo, el Partido de los Trabajadores (PT) formalizó a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, como candidata a la reelección en los comicios de octubre de este año.
Pese a que el nombre de la sucesora de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), ya figuraba entre las listas de candidatos, fue hasta los primeros 10 días en los que transcurre la Copa del Mundo que su postulación fue confirmada.
Aunque Rousseff lidera las encuestas de intención de voto, a decir de los brasileños, el resultado de la Copa del Mundo 2014 podría modificar la popularidad y aprobación de la población hacía la mandataria.
La construcción de nuevos estadios y remodelaciones e intervenciones urbanas cerca de otros centros deportivos, acarrearon a la jefa de Estado múltiples críticas. Sin embargo, a diez días de iniciada la Copa del Mundo, ha disminuido la confrontación.
Los más de 600 mil extranjeros que se esperaban en Brasil, han dejado importantes derramas económicas en los locales, por lo que entre los brasileños hay opiniones encontradas sobre la presidenta y la participación de su país como anfitrión.
En las últimas encuestas elaboradas por el Instituto Ibope, la jefe de Estado había perdido terreno y aún con ese escenario si las elecciones se realizaran durante los primeros días de junio, Rousseff obtendría el 39 % de los votos.
El estudio de opinión señala que aunque Dilma perdió cinco puntos de popularidad, sigue a la cabeza frente al 21 % de intención del voto para el senador Aecio Neves, candidato de Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), y el 10 % del exgobernador de Pernambuco Eduardo Campos del Partido Socialista Brasileño (PSB).
Según el sondeo, Rousseff y Neves tendrían que medirse en una eventual segunda vuelta, en la que la jefa de Estado sería reelegida con el 43 % de los votos frente al 30 % del candidato del PSDB.
La misma encuesta mostró que tras los preparativos y la inversión realizada para este encuentro deportivo, el número de brasileños que califican positivamente al gobierno de Rousseff cayó cinco puntos porcentuales en los últimos tres meses, desde el 36 % en marzo hasta el 31 % en junio.
Sin embargo, como advierten los brasileños, el éxito obtenido en la Copa por la selección de Brasil y los resultados que deje el encuentro futbolístico más grande e importante del mundo, decidirán el sentido del voto de los brasileños en noviembre próximo.